martes, 22 de febrero de 2011

Ideario de Fe en Juan Pablo Duarte



Por Alfonso Torres Ulloa

Conocemos que Duarte fue un hombre de fe, pero no hemos ahondado en ese pensamiento; en mi libro Duarte desde La Palabra abordo el tema a profundidad y ordené todo el ideario de Fe del patricio, por lo que ahora se lo entrego a los amables lectores para que hagan por si mismos el análisis de tan trascendental ideario.
Y quienes tenga el interés de ahondar en el mismo los invito a consultar mi libro "DUARTE DESDE LA PALABRA"
1.- En el nombre de la Santísima, Augustísima e Indivisible Trinidad de Dios Omnipotente, juro y prometo, por mi honor y mi conciencia, en manos de nuestro presidente señor Juan Pablo Duarte, cooperar con mi persona, vida y bienes habidos y por haber, a la Separación definitiva del gobierno haitiano y a implantar una República libre y soberana e independiente de toda dominación extranjera, que se denominará República Dominicana, la cual tendrá su pabellón tricolor, en cuartos encarnados y azules, atravesado con una cruz blanca; la República establecerá su correspondiente escudo de armas. Mientras tanto seremos reconocidos los Trinitarios, con las palabras sacramentales: "Dios, Patria y Libertad". Así lo ratifico y prometo ante Dios y ante el mundo. Si tal hago, Dios me proteja, y de no, me lo tome en cuenta, y mis consocios me castiguen el perjurio y la traición, si los vendo.

2.- Dios ha de concederme bastante fortaleza para no descender a la tumba sin dejar mi Patria libre, independiente y triunfante.
3.- Los providencialistas son los que salvarán la Patria del infierno a que la tienen condenada los ateos, cosmopolitas y orcopolitas.
4.- El buen dominicano tiene hambre y sed de justicia ha largo tiempo, y si el mundo se la negase, Dios que es la Suma Bondad, sabrá hacérsela cumplida y no muy dilatado; entonces, ¡ay! de los que tuvieron oídos para oír y no oyeron, de los que tuvieron ojos para ver y no vieron.... ¡la Eternidad de nuestra idea! Porque ellos habrán de oír y habrán de ver entonces lo que no hubieran querido oír ni ver jamás.
5. Trabajemos, trabajemos sin descansar, no hay que perder la fe en Dios, en la Justicia de nuestra causa y en nuestros propios brazos.
6. ¿Tienes amigos? Prepáralos, porque los días se acercan; procura que no se descarríen, pues va a sonar la hora de anularse para siempre, la hora tremenda del juicio de Dios, y el Providencial no será vengativo, pero sí justiciero.
7.- Sed justos lo primero, si queréis ser felices, ese es el primer deber del hombre; sed unidos, así apagareis la tea de la discordia y venceréis a vuestros enemigos, y la patria será libre y salva. Yo obtendré la mayor recompensa, la única a que aspiro, al veros libres, felices, independientes y tranquilos.
8. No somos más que unos ambiciosos que independizamos nuestro pueblo por ambición y no tuvimos talento para hacer nuestra la riqueza ajena; mientras que ellos (los orcopolitas), son los hombres honrados y virtuosos, pues han tenido la habilidad de hacerlo todo, hasta llamar al extranjero; muestra inequívoca de lo muy amados que serán por la justicia con que han procedido y procederán para con Dios y la Patria y la Libertad del Dominicano.
9. Ningún poder de la tierra es ilimitado, ni el de la ley tampoco.
10. La religión predominante en el Estado deberá ser siempre la católica, Apostólica, sin perjuicio de la libertad de conciencia y tolerancia de cultos y de sociedades no contrarias a la moral pública y caridad evangélica.
11. Sonó la hora de la gran traición..., y sonó también para mí la hora de la vuelta a la Patria: el Señor allanó mis caminos...
12. No he dejado ni dejaré de trabajar a favor de nuestra santa causa haciendo por ella, como siempre, más de lo que puedo; y si no he hecho hasta ahora todo lo que debo y he querido, quiero y querré hacer siempre en su obsequio, es porque nunca falta quien desbarate con los pies lo que yo hago con las manos.
13. Mientras no se escarmiente a los traidores como se debe, los buenos y verdaderos dominicanos serán siempre víctimas de sus maquinaciones.
14. Ahora bien, si me pronuncié dominicano independiente. Desde el 16 de julio de 1838, cuando los nombres de Patria, Libertad, Honor Nacional se hallaban proscritos como palabras infames, y por ello merecí, en el año de 1843, ser perseguido a muerte por esa fracción haitiana, y por Riviére que la protegía, y a quien engañaron; si después, en el año de 1844 me pronuncié contra el Protectorado francés, decidido por esos facciosos, y cesión a esta Potencia de la Península de Samaná, mereciendo por ello todos los males que sobre mí han llovido; si después de veinte años de ausencia he vuelto espontáneamente a mi Patria a protestar con armas en la mano contra la anexión a España llevada a cabo a despecho del voto nacional por la superchería de ese bando traidor y parricida, no es de esperarse que yo deje de protestar, y conmigo todo buen dominicano, cual protesto y protestaré siempre, no digo tan sólo contra la anexión de mi Patria a los Estados Unidos, sino a cualquiera otra potencia de la tierra, y al mismo tiempo contra cualquier tratado que tienda a cercenar nuestro territorio o cualquier de los derechos del Pueblo Dominicano.
15. Por desesperada que sea la causa de mi Patria, siempre será la causa del honor y siempre estaré dispuesto a honrar su enseña con mi sangre.
16. El amor a la patria nos hizo contraer compromisos sagrados para con la generación venidera; necesario es cumplirlos, o renunciar a la idea de aparecer ante el tribunal de la Historia con el honor de hombres libres, fieles y perseverantes.
17. Sensible a la honra que acabareis de hacerme, dispensándome vuestros sufragios para la primera Magistratura del Estado, nada me será más lisonjero que saber corresponder a ella llenando el hueco de vuestras esperanzas, no por la gloria que de ello resultaría, sino por la satisfacción de veros, cual lo deseo, libres, felices, independientes y tranquilos, y en perfecta unión y armonía llenar vuestros destinos, cumpliendo religiosamente los deberes que habéis contraído para con DIOS, para con la PATRIA, para con la LIBERTAD y para con vosotros mismos.
18. La política no es una especulación; es una Ciencia la más pura y la más diga, después de la Filosofía de ocupar las inteligencias nobles.
19.- Lo poco o mucho que hemos podido hacer o hiciéramos aún en obsequio de una patria que nos es tan cara, y tan digna de mejor suerte, no dejará de tener imitadores y este consuelo nos acompañará a la tumba.

20.- Seguid, jóvenes amigos, dulce esperanza de la patria mía, seguid con tesón y ardor en la hermosa carrera que habéis emprendido y alcanzad la gloria de dar cima a la grandiosa obra de nuestra regeneración política, de nuestra independencia nacional, única garantía de las libertades patrias.

21.- Quisqueyanos, sonó ya la hora de vengar tantos siglos de ultraje, y el que a Dios y a su patria desdora que en oprobio y baldón se amortaje.

22.- No es la cruz el signo del padecimiento: es el símbolo de la redención.

23.- Por la patria es honroso morir.
Del inicuo en el alma no cabe
Por la patria el aliento rendir
Pero el hombre virtuoso bien sabe
Que por ella es honroso morir!

jueves, 17 de febrero de 2011

CARTA PASTORAL FEBRERO 2011


500 AÑOS EN DEFENSA DE LA DIGNIDAD HUMANA


1.- Introducción.



El 8 de Agosto 2011 conmemoramos los 500 años de creación de las tres primeras diócesis en el nuevo mundo: Santo Domingo, La Vega y San Juan de Puerto Rico. Al mismo tiempo celebraremos, el 4 de Diciembre 2011, los 500 años del Sermón de Fray Antón Montesino, pronunciado en el tiempo de adviento de 1511.


2. En este mensaje, con motivo de la celebración del 27 de Febrero, año 167 de la Independencia de nuestra Patria, queremos referirnos al segundo acontecimiento: El Sermón de Montesino, que fue el primer grito de defensa del mundo indígena ante la opresión y el maltrato de los colonizadores.


I. Contexto histórico del Sermón

a) Descubrimiento

3. El 12 de Octubre del año 1492 marcó una fecha clave: el Almirante Cristóbal Colón, con las tres carabelas procedentes de España, llegó a estas tierras y plantó en ella la cruz de Cristo. “Al contemplar, con una mirada de fe la implantación de la cruz de Cristo en este continente... comprendemos que fue Él, Señor de la historia, quien extendió el anuncio de la salvación a dimensiones insospechadas” 1


4. Colón y sus navegantes descubren el Nuevo Mundo en nombre de los Reyes Españoles, quienes a su vez les conceden títulos con amplios poderes políticos y jurisdiccionales sobre los territorios conquistados, quedando los indígenas subyugados a un poder más cercano y no tanto al poder central muy lejano.


b) Encomenderos

5. Muy pronto menguan las riquezas naturales, los descubridores pasan al sistema de “encomienda”, aprobado por la Corona de España, que consistía en la apropiación de tierra y de indígenas encomendados, con el deber de educarlos en la fe y promoverlos.


6. Los encomenderos se fueron olvidando de sus deberes para con los indígenas. Sólo les interesaba el oro y más esclavos para aumentar su riqueza. En su afán de conquista y explotación pretendían refugiarse en la corona real y en la Iglesia, intentando que esta última les apoyara en sus apetencias. Unos encomenderos se justificaban afirmando que los indígenas no eran seres humanos, que no tenían almas, y por lo tanto podían explotarlos y someterlos a toda clase de servidumbre; otros, se justificaban pensando que el bautismo ofrecido a los indígenas les dada derecho a apropiarse de ellos.



IV CONFERENCIA DEL EPISCOPADO LATINOAMERICANO,
documento de santo domingo, 2.


7. Los conquistadores o colonizadores, cristianos sólo por el título que les confería el bautismo, se volvieron una jauría ávida de rapiña y dispuesta a enriquecerse a cualquier precio y trataron a los nativos “peor que a estiércol de las plazas” 2 y peor que a las bestias del campo3, los degradaron y humillaron, a decir del Padre las Casas, quien primero fue encomendero poseedor de esclavos hasta que comprendió -al negársele la comunión por un sacerdote por poseer esclavos, y al leer las Sagradas Escrituras-que el pobre no posee nada como no sea el pan y que quien se lo quite es un asesino, al igual que quien no le da su salario al trabajador, es un criminal.


c) Los evangelizadores


8. Con la llegada de los primeros misioneros en el segundo viaje de los descubridores comenzó la evangelización propiamente dicha. Se iniciaba así la siembra del don precioso de la fe.


9. Los misioneros franciscanos, dominicos y mercedarios, vinieron desde España, al igual que los encomenderos, pero con sensibilidad y finalidad diferente. Ellos llegaron a estas tierras a difundir el mensaje de la salvación, a implantar la Iglesia, a dar frutos de amor, cumpliendo el mandato de Jesucristo ´Id por todo el mundo y proclamad el evangelio a toda creaturaª (Mc 16,15).


2 FRAY BARTOLOMÉ DE LAS CASAS, historia de las indias, tomo II, cap. 1. 3 cfr. obra citada, cap. 11.


10. De estos misioneros nos dice el Papa Juan Pablo II en el Documento de Santo Domingo: “Damos, pues, gracias a Dios por la pléyade de evangelizadores que dejaron su patria y dieron su vida para sembrar en el Nuevo Mundo la vida nueva de la fe, la esperanza y el amor. No los movía la leyenda de ´El Doradoª, o intereses personales, sino el urgente llamado a evangelizar unos hermanos que aún no conocían a Jesucristo. Ellos anunciaron ´la bondad de Dios nuestro Salvador y su amor a los hombresª (Tit 5,4) a unas gentes que ofrecían a sus dioses incluso sacrificios humanos... Ellos testimoniaron, con su vida y con su palabra, la humanidad que brota del encuentro con Cristo. Por su testimonio y su predicación, el número de hombres y mujeres que se abrían a la gracia de Cristo se multiplicaron ´como las estrellas del cielo, incontables como las arenas de las orillas del marª (Hb 11,12)” 4.


11. Sigue afirmando el Papa que “los datos históricos muestran que se llevó a cabo una válida, fecunda y admirable obra evangelizadora y que, mediante ella, se abrió camino de tal modo en América la verdad sobre Dios y sobre el hombre que, de hecho, la evangelización misma constituye una especie de tribunal de acusación para los responsables de aquellos abusos” 5. La misión de la naciente Iglesia fue la predicación, la administración de los sacramentos, la enseñanza y la asistencia social. “Prediquen el Santo Evangelio y enseñen a los infieles, y con buenas palabras los conviertan a la veneración de la Fe Católica, y ya convertidos, los instruyan en la religión cristiana, les den y administren el Santo Sacramento del Bautismo. Y así convertidos, como los demás fieles de Cristo, les administren los santos sacramentos de la Confesión, de la Eucaristía y los demás”, decía el papa Julio II en el cuarto párrafo de su bula Romanus Pontifex del 8 de agosto de 1511 6.


4 Documento de Santo Domingo, discurso inaugural, 3. 5 Idem, 4.


12. Con los primeros misioneros vino también la defensa de la dignidad humana y de los derechos de los nativos. El mejor ejemplo fue el Sermón, que en nombre de su comunidad sacerdotal, pronunció Fray Antón Montesino y que ayudó a un encomendero a convertirse en Fray Bartolomé de las Casas, el gran defensor de los indígenas.


II. El Sermón de Montesino


13. El Sermón llamado de Montesino es el fruto de la reflexión de la comunidad de los frailes dominicos bajo la dirección de Fray Pedro de Córdoba y pronunciado en una misa dominical del tiempo de adviento, en Diciembre del año 1511. El hecho lo recoge el Padre Bartolomé de las Casas en el libro tercero, capítulo cuarto, de su Historia de las Indias.


14. Presentamos lo sucedido luego de esta decisión y acuerdo, tal y como lo narra el Padre las Casas, en el lenguaje de la época. “Llegado el domingo y la hora de predicar, subió en el púlpito el susodicho padre fray Antón Montesino, y tomó por tema y fundamento de su sermón, que ya llevaba escripto y firmado de los demás: Ego vox clamantis in deserto. Hecha su introducción y dicho algo de lo que tocaba a la materia del tiempo del Adviento, comenzó a encarecer la esterilidad del desierto de las conciencias de los españoles desta isla y la ceguedad en que vivían; con cuánto peligro andaban de su condenación, no advirtiendo los pecados gravísimos en que con tanta insensibilidad estaban continuamente zambullidos y en ellos morían. Luego torna sobre su tema, diciendo así: “Para os lo dar a cognoscer me he sobido aquí, yo que soy voz de Cristo en el desierto desta isla, y por tanto, conviene que con atención, no cualquiera, sino con todo vuestro corazón y con todos vuestros sentidos, la oigáis; la cual vos os será la más nueva que nunca oísteis, la más áspera y dura la más espantable y peligrosa que jamás no pensásteis oír”. Esta voz encareció por buen rato con palabras muy pugnitivas y terribles, que les hacía estremecer las carnes y que les perecía que ya estaban en el divino juicio. La voz, pues, en gran manera, en universal encarecida, declaróles cuál era o qué contenía en sí aquella voz: “Esta voz, dijo él, que todos estáis en pecado mortal y en él vivís y morís, por la crueldad y tiranía que usáis con estas inocentes gentes. Decid, ¿Con qué derecho y con qué justicia tenéis en tan cruel y horrible servidumbre aquestos indios? ¿Con qué autoridad habéis hecho tan detestables guerras a estas gentes que estaban en sus tierras mansas y pacíficas; donde tan infinitas dellas, con muertes y estragos nunca oídos, habéis consumido? ¿Cómo los tenéis tan opresos y fatigados, sin dalles de comer ni curallos en sus enfermedades, que de los excesivos trabajos que les dáis incurren y se os mueren, y por mejor decir, los matáis, por sacar y adquirir oro cada día? ¿Y qué cuidado tenéis de quien los doctrine, y conozcan a su Dios y criador, sean baptizados, oigan misa, guarden las fiestas y domingos? ¿Estos, no son hombres? ¿No tienen ánimas racionales? ¿No sois obligados a amallos como a vosotros mismos? ¿Esto no entendéis? ¿Esto no sentís? ¿Cómo estáis en tanta profundidad de sueño, tan letárgico, dormidos? Tened por cierto, que en el estado que estáis no os podéis más salvar que los moros o turcos que carecen y no quieren la fe de Jesucristo” 7. Josef Metzler (ed.), américa pontificia i (cittá del vaticano: librería editrice vaticana, 1991), p. 114; colección de documentos inéditos xxxix (madrid, 1880), p. 30; j. l. sáez (ed.) documentos de la provincia eclesiástica de santo domingo (santo domingo, 1998), p. 90.


15. Cuenta el Padre las Casas que los oyentes del Sermón no aceptaron la enseñanza ni el llamado. Estos reaccionaron violentamente en contra de los dominicos, llegando a perseguirlos.


16. El Sermón procura crear conciencia en los españoles de su cruel pecado contra los indígenas. Fue un llamado a la conciencia cristiana de su tiempo. Los puntos claves del Sermón deben entenderse sobre el trasfondo de la práctica judicial y pueden ser estructurados del siguiente modo: La opresión a que estaban sometidos los indígenas era tan grave que podía compararse con el cumplimiento de una sentencia condenatoria a causa de algún crimen cometido. Ello supondría la existencia de un derecho vigente, de una autoridad que juzgara y fijara la sentencia, así como de una “justicia” que la ejecutase. Por eso los frailes preguntaban: ¿con qué derecho, con qué autoridad y con qué justicia sucede todo esto?
FRAY BARTOLOMÉ DE LAS CASAS, historia de las indias, tomo III, capítulo 4.


17. La raíz principal del abuso cometido contra los indígenas y, por lo tanto, la razón fundamental de la denuncia consistió en la falta de reconocimiento de la dignidad humana de los mismos. De ahí la interpelación: ¿acaso éstos no son personas?, ¿acaso no tienen almas racionales? Los otros argumentos, como la necesidad de que los indígenas sean evangelizados y bautizados, presuponen el anterior.


18. Los españoles, obcecados por el afán del oro, se olvidan de que su condición de cristianos les compromete a amar a los indígenas como a sí mismos y a anunciarles la Buena Nueva para que conozcan, amen y den culto al Dios de Jesucristo.


19. La comunidad de los frailes dominicos, en nombre de la dignidad humana y de las obligaciones cristianas, ofrece la siguiente sentencia en contra de los colonizadores: Todos vosotros estáis en pecado mortal; en él vivís y en él morís. En ese estado en que os encontráis no podréis salvaros, pues vuestro comportamiento equivale a carecer de la fe en Jesucristo y a no quererla. Si seguís maltratando a los indígenas, dad por seguro que los pecados que confeséis no recibirán nuestra absolución.


20. Este Sermón cambió el destino de América, dio inicio a la lucha contra la opresión y el exterminio de los pueblos aborígenes del Nuevo Mundo. Desde entonces, Fray Antón Montesino es símbolo de la defensa de la justicia y de los derechos humanos.


21. La dignidad de la persona humana es lo que está en la base de nuestro Sermón. Los primeros dominicos llegados a esta isla defendían que los tenían “almas racionales”, lo cual, en el lenguaje de la época, significaba su dignidad humana, como decía Santo Tomás: subsistir en la naturaleza racional es de la máxima dignidad, todo individuo de naturaleza racional es llamado persona, de tal modo que en el nombre de persona se expresa la dignidad misma 8.


22. “Ese profundo estupor respecto al valor y a la dignidad del hombre se llama Evangelio, es decir, Buena Nueva. Se llama también cristianismo” afirmaba Juan Pablo II 9 . El Evangelio está en la base de la Declaración Universal de los Derechos Humanos. Está en la base de los derechos sociales, como nos dice Benedicto XVI: “uno de los problemas sociales más graves de las últimas décadas, como es la conciencia creciente óque ha surgido en parte con la globalización y con la actual crisis económicaó de un flagrante contraste entre la atribución equitativa de derechos y el acceso desigual a los medios para lograr esos derechos. Para los cristianos que pedimos regularmente a Dios: ’Danos hoy nuestro pan de cada día’, es una tragedia vergonzosa que la quinta parte de la humanidad pase aún hambre” 10.


III. Una mirada actual al Sermón de Montesino

23. El Sermón de Montesino hoy:


a) Una voz clama en los nuevos desiertos de nuestra República Dominicana y nos pregunta ¿con qué derecho y con qué justicia tenemos a nuestro pueblo en tal cruel y horrible servidumbre?:
8 Cfr. Summa Theologica I, Q. 29, Art. II. 9 JUAN PABLO II, redemptor hominis, 10. 10 BENEDICTO XVI,discurso a la academia pontificia de ciencias sociales, 4 de mayo de 2009.

ï ¿Con qué justicia se mantiene en la insalubridad a poblaciones enteras de nuestros campos que con un poco de ayuda y asistencia técnica harían ellos mismos sus propios sistemas de almacenamiento y distribución del agua potable?

ï ¿Con qué justicia permitimos a una inmensa población que viva sin condiciones sanitarias en sus viviendas, población que sólo en el suroeste equivale a más de un 20% de las familias, lo que propicia la falta de dignidad de la persona, la contaminación con todas clases de enfermedades y la propagación del cólera?

ï ¿Con qué derecho se mantiene a una población dominicana, que se estima más de 20% sin declarar, y que no tiene derecho a un nombre y a su propia nacionalidad. Dato que ni siquiera se coloca en el Censo Nacional para no sufrir la crueldad de verlos oficialmente con nuestros propios ojos?

ï ¿Con qué derecho, tanto nosotros como las autoridades, que disfrutamos del privilegio de una profesión, de un trabajo digno y de cierto bienestar, podemos permitir que hayan personas analfabetas, sin el derecho a saber leer y escribir?

ï ¿Con qué justicia se consiente que nuestros hermanos vivan en casas indignas, construidas en las riveras de ríos y cañadas? ¿Dónde está la autoridad que regule las construcciones de las viviendas? ¿Dónde están los programas de ayudas para que los más pobres puedan ellos mismos construir sus propias casas?

ï ¿Con qué derecho se priva a nuestro pueblo de una enseñanza moral y cívica, de una formación integral, humana y religiosa que nos deja como consecuencia ciudadanos corruptos, y funcionarios que exigen prebendas para nombramientos y proyectos de inversiones?

ï ¿Con qué justicia se tolera que jóvenes no tengan oportunidad de educación, y si la tienen se cansan en las escuelas porque no ven rendimiento, y abandonan sus estudios en los primeros grados, por causa de un sistema de educación que se consume en un círculo vicioso con muchos maestros con títulos para mejorar salarios, pero no para mejorar la enseñanza y el aprendizaje, y un Ministerio de Educación con insuficientes recursos y sin control para mejorar el sistema educativo?

ï ¿Con qué derecho se permite que niños y niñas deambulen por las calles, sin ningún tipo de protección, a consecuencia de padres irresponsables que los han engendrados, sin tener en cuenta la repercusión de sus actos y dejar que esos hijos crezcan traumatizados?

ï ¿Con qué justicia se permite que mujeres, niñas y niños sean abusados, maltratados y explotados, ante lo cual callamos y en componendas silenciamos? ¿Con qué derecho permitimos queempresasforáneasrealicen sus acciones comerciales sin que se respeten nuestras leyes que protegen la naturaleza, y se lleven además, el beneficio de nuestros recursos naturales y al pueblo dominicano dejándole sólo migajas y destrozos ambientales?

ï ¿Con qué justicia los bautizados de hoy día mantenemos a una inmensa mayoría privados del don de la fe al no cumplir con el deber de anunciar el Evangelio con el testimonio de nuestras vidas haciendo presente el Reino de Dios?


b) Hoy también el profeta nos pregunta ¿con qué autoridad hemos hecho estas detestables guerras?:

ï ¿Con qué autoridad el Estado propicia que se siga llenando el País de bancas y todo juego de azar, que explotan a los más pobres y los mantienen en la miseria, imposibilitando salir de ella, con el pretexto de que se les cobran unos impuestos, para luego devolvérselos a los más pobres e infelices como dádivas?


ï ¿Con qué autoridad se permite que se asignan sueldos de lujo, cuando hay tantos salarios de miseria y una gran mayoría de jóvenes que no tiene acceso a un trabajo remunerativo, favoreciendo así puestos privilegiados en detrimento de los que no han podido estudiar o han estudiado en escuelas públicas infuncionales?


ï ¿Con qué autoridad hemos permitido que se pierda el sentido social que tienen los bienes, tanto los materiales como los humanos, que no son una propiedad privada absoluta y que deben ser compartidos, dejando de lado los egoísmos? ¿Qué hemos hecho del mandato de la Iglesia Católica, que enseña que los bienes tienen una “hipoteca social” respaldando así el principio de solidaridad?


ï ¿Con qué autoridad quitamos el derecho a nuestros hijos de vivir en un país limpio y ordenado, por no corregir los daños ecológicos y a la vez no educarlos seriamente en una cultura ambiental y en armonía con la naturaleza?


ï ¿Con qué autoridad se aprueban salarios injustos con los cuales los trabajadores, no pueden cubrir sus necesidades de alimentación, de vestido y vivienda, que son las mínimas para poder sobrevivir?


ï ¿Con qué autoridad se excarcelan criminales ricos, narcotraficantes y poderosos, mientras que, por aplicar simples procedimientos, víctimas inocentes se quedan sin que se les haga justicia, y pobres e inocentes se encarcelan fácilmente.


IV. Juicio: En este estado de cosas no podemos salvarnos

24. En este estado de incertidumbre, desigualdad social, pobreza, delincuencia, deficiencia educativa, violencia, impunidad, destrucción y contaminación del ambiente, pérdida de valores e identidad, no puede haber una convivencia humana digna. En esta situación de atracos, sicariato, narcotráfico, participación de autoridades en actos delictivos, corrupción administrativa, politiquería clientelista, inseguridad ciudadana, no podemos construir un país libre, soberano e independiente, tal como lo soñara el Padre de la Patria, Juan Pablo Duarte.


25. La sociedad necesita un cambio de mentalidad, ser más solidaria, afianzarnos en los valores humanos y cristianos; que trabajemos en conjunto para erradicar los grandes males que afectan a los dominicanos. Hoy más que nunca se necesita la unificación de criterios y trabajo en conjunto de todos los líderes e instituciones del País, la unidad de las familias, de los sectores y comunidades y de toda persona de buena voluntad. Necesitamos que nuestras voces proféticas se encaminen por ideales patrios, que beneficien a toda la sociedad y no tanto a particulares.


26. Para que haya patria sana no basta que las voces clamen solas en el desierto donde nadie las escuche, se requieren voces que clamen paz y justicia en la sociedad. Se requiere que todos los dominicanos nos preocupemos para revertir el desierto de pecado e injusticia en el que hemos sumergido nuestro País, luchando y trabajando unidos con signos de esperanza, de cambio y salvación, y haciendo visible el Reino de Dios en todas las personas y en todos los acontecimientos.


V. Hagamos realidad los principios fundamentales de nuestra Constitución

27. No queremos concluir nuestro Mensaje sin antes recordar los principios fundamentales consagrados en nuestra Constitución. La Constitución Dominicana establece que los poderes públicos tienen la responsabilidad de proteger los derechos fundamentales del ser humano, el derecho a la vida (Art 37), dignidad humana (Art 38), igualdad ante la ley (Art 39), a la libertad y seguridad personal (Art. 40), a la integridad personal (Art 42), al libre desarrollo de la personalidad (Art 43) , a la intimidad y el honor personal (Art 44), a la libertad de conciencia y de culto (Art 45), a la libertad de tránsito (Art 46), a la asociación y reunión (Arts 47 y 48), a la libertad de expresión e información (Art 49), a la seguridad alimentaria (Art 54), a la familia (Art 55), a la protección de los niños, ancianos y discapacitados (Arts 56-58), a la vivienda (Art 59), a la seguridad social (Art 60), a la salud (Art 61), al trabajo (Art 62), a la educación (Art 63); proteger, igualmente, los derechos culturales y deportivos (Arts 64-65), colectivos y de medioambiente (Arts 66-67), entre otros.


28. Hagamos valer nuestra Constitución, la cual “se fundamenta en el respeto a la dignidad humana y en la indisoluble unidad de la Nación, patria común de todos los dominicanos y dominicanas” (Art. 5). Superemos la gran brecha que separa el discurso de la realidad, la teoría de la práctica. Ante la sociedad de imagen que vivimos se impone hoy construir un estado de derecho, donde se pongan en práctica los principios de nuestra Carta Magna y se guarde el debido respeto a las leyes.


Conclusión


29. Con este mensaje “500 años en defensa de la dignidad humana”, conmemorando el Sermón de Montesino queremos hacer una invitación a todos los dominicanos, hombres y mujeres de buena voluntad a cumplir con nuestros deberes y exigir nuestros derechos ciudadanos, como hijos e hijas de esta Patria que llamamos República Dominicana; y a cumplir con nuestras obligaciones de hijos de Dios y hermanos entre nosotros, como “discípulos elegidos y enviados para la misión”.


Les bendicen, bajo el amparo y la protección de nuestra Señora de La Altagracia, Conferencia del Episcopado Dominicano.


viernes, 11 de febrero de 2011

¿IMPUTADOS POR QUE?



Por Juan F. De la Rosa

En mayo dos mil ocho el Banco de Ahorro y Crédito del Caribe, S. A., financió el vehículo Tipo Jeep Marca Nissan, Modelo Murano, Año 2001, Color Blanco, Placa No. G116992, Chasis JN8AZ08TW209914, amparado en la ley 483 de 1964.

Un año después ese bien fue embargado por la empresa Procesadora de Alimentos Prodal, C. Por A, según Acto No. 298/2009, porque la cliente común incumplió una obligación con el ejecutante.

Percatado nuestro representado de tal acción en contra de la garantía, notificó en fecha trece de mayo dos mil nueve el Acto No. 2826, donde comunicó al embargante la documentación que confiere el derecho de propiedad del mueble atacado, y al mismo tiempo solicitó la devolución, en razón de que la contratante nunca pagó al Banco el crédito convenido.

Cuando el BACC, ubicó el vehículo procedió a incautarlo conforme a la ley de Venta Condicional de Muebles. A partir de ese momento Procesadora de Alimentos Prodal, C. Por A, inició una persecución en perjuicio de la Gerente del Banco y sus abogados, pretendiendo con ello atemorizarnos para apropiarse del vehículo sin ningún fundamento jurídico.

Recuperado el bien la contraparte a través de un supuesto subastador (que nunca da su dirección en los reclamos que hace) presentó denuncia de robo ante la Subdirección Central de Investigaciones de Vehículos Robados (DIVER), D. N. Con los mismos abogados que trabajaron en la ejecución comentada. Respondimos con argumento Jurídico, mediante instancia depositada en fecha ocho de Diciembre dos mil nueve.

Esa actuación fue contestada por Osvaldo Esteban Rollan Estévez, quien se auto define como la persona que compró en subasta el bien descrito, pese a que el Articulo 9 de la Ley 483 1964, prohíbe de manera tajante cualesquier actividad comercial con un mueble en la circunstancia vista. Con una querella en perjuicio de los señores: Lic. María Julia Díaz, Dr. Ramón Urbáez Brazobán, Lic. Pedro Pablo Cordero Lama, Lic. Juan Francisco de la Rosa, y Banco de Ahorro y Crédito del Caribe, S. A, “imputados” de violar los Artículos 55,147, 148, 150, 151, 164, 165, 265, 266, 379, 381, ordinal 4 384, y 405 del Código Penal dominicano, y como era de esperar solicitando una indemnización de DIEZ MILLONES DE PESOS (RD$10,000,000.00).

Todas estas arbitrariedades contaron con el apoyo del Procurador Fiscal Adjunto Lic. Francis Omar Soto Mejía, quien trabajó en la Subdirección Central de Investigaciones de Vehículos Robados (DIVER), D. N, y en varias vistas celebradas allí trató siempre de crear las condiciones para un acuerdo que la legislación vigente no contempla. Sabiendo él que somos inocentes, porque el Banco de Ahorro y Crédito del Caribe, no puede robarse su propio vehículo.

Para nosotros ha resultado muy extraño que habiendo sido trasladado el Lic. Francis Omar Soto Mejía, de la Subdirección Central de Investigaciones de Vehículos Robados (DIVER), se llevara el expediente. Fuimos a pedirle explicación a la sustituta Magistrada Ramona Nova Cabrera, de las últimas embestidas de este funcionario en perjuicio del Banco, y recibimos una explicación cortante: “aquí no hay expediente él se lo llevó”.

El Ministerio Público tiene la obligación de llamar al subalterno y exigirle que sus actuaciones estén bajo el predicamento de los Artículos 169 y 170 de la Constitución Dominicana, y demás leyes adjetivas.

domingo, 6 de febrero de 2011

CONSENSO UNIVERSITARIO Y ALIADOS CELEBRAN TALLER ELECTORAL




El Movimiento Académico Consenso Universitario y sus Aliados celebró en el día de hoy un Taller Nacional para entrenar a todos sus delegados, de modo que el próximo 15 de febrero los votos que deben coronar al Maestro Nino Feliz como Rector 2011-2014 en la Universidad Autónoma de Santo Domingo no sean extraviados; se entrenaron los delegados con la disciplina de soldados de una causa y las herramientas necesarias del Reglamento y del instructivo Electorales.


Confiados del trabajo realizado y del apoyo que ha recibido la candidatura de Nino y la concurrencia masiva de los delegados el taller reflejó confianza en la sonrisa de los talleristas.

Los maestros Ramón Rodríguez, Héctor Sánchez, Mario Hernández y Ramón Diloné fueron los instructores en el mismo.

Como actividad solemne de Consenso inicia con el canto a la patria, pues la cruzada que hemos emprendido por rescatar la UASD es un compromiso de Patria, toda vez que ella es el primer faro de luz de la nación y el centro de movilidad social de los jóvenes pobres del país, de ahí que preservar la institución es vital para garantizar que los pobres estudien una carrera superior.

En el Movimiento las mujeres marcan la pauta y el entusiasmo, por lo que en cada actividad su voz se deja oír firme y militante, es el silencio que predomina cuando Hilda Trinidad, Francisca Custodio, Eddy Ramírez, Paula Méndez, Genoveva Martín, Norma Duarte, Olga Sosa, Lucía Hernández, Ana Dolores del Rosario u otra de las valerosas mujeres hacen uso de la palabra. El fuerte son las mujeres. Van a pasos firmes.

En el momento en que la maestra Hilda Trinidad hacía una invocación a Dios, después de entonar el Himno Nacional.
En un taller anterior, el sábado 30 de enero, Hilda dijo: "soy una soldada de este proyecto, envíenme donde ustedes quieran como delegada, soy de Bonao, puedo ir allá, doy clases en San Pedro, puedo ir allá, imparto docencia aquí en la sede y vivo aquí, puedo ser delegada en la sede, perdonen la modestia, de esto yo sé, ponganme donde sea más útil".
Y todo se estremeció con la palabra de la Pastora y Maestra Hilda Trinidad.

El candidato dio la bienvenida a los delegados, a las delegadas, y acto seguido se iniciaron los trabajos del taller con la intervención de Ramón Rodríguez.

El candidato agradeció el apoyo de los delegados de los centros regionales, quienes con su propio esfuerzo vinieron del interior para prepararse y dominar el procedimiento electoral en el momento crucial de las votaciones.

Una nota particular la puso esta niña, quien dijo que tenía algunas palabras de motivación y descolgó del ideario del patricio un pensamiento y nos invitó, con su sonrisa segura y tierna, a: Trabajemos, trabajemos sindescansar, no hay que perder la fe en Dios, en la justicia de neustra causa y en nuestros propios brazos".


El maestro Ramón Rodríguez demostró habilidad y dominio del reglamento electoral y de su instructivo, lo fue destilando paso a paso, de modo y manera que los delegados y delegadas realicen el mejor trabajo en cada centro de votación, defendiendo la legalidad del proceso, los votos que nos favorezcan y a actuar con comedimiento, pero con apego a los principios y la normativa legal y ética.

El interés de los y las talleristas se puso de manifiesto con las decenas de preguntas y comentarios que se hicieron. Destacando los aportes de la maestra Francisca Custudio y las curiosidades y anécdotas de Eddy Ramírez.

Una vista parcial de los talleristas, destacando en primera fila, de izquierda a derecha Hilda Trinidad, Nino Felliz, Genoveva Martín y Eddy Ramírez.

Una disciplina consciente se mantuvo en todo el trayecto del taller, el cual se extendió hasta las 2:00 p.m.


El maestro Héctor Sánchez, justo a las 12:10 p.m., al empezar su turno sugirió un receso, pero el ánimo a esa hora estaba como al inicio del taller a las 9:30a.m. y con un fuerte aplauso se decidió continuar trabajando. Eso generó espontáneamente que se pusiera la concurrencia de pie y se diera ella misma un prolongado aplauso.



Momento en que la maestra Eddy Ramírez hacía una de sus alegres intervenciones para aportar su experiencia en los temas que se iban desarrollando.
Mientras Héctor Sánchez escuchaba, pues también aprendía de ella. Una experiencia única la vivida en este taller nacional.

Vista parcial de la mesa principal, al momento de inaugurar el taller.
Destacan delegados de Mao Valverde, San Juan de la Maguana, Higuey, Barahona, Nagua, San Francisco.
Y la presencia de Don Iván Rodríguez y Hecminio Galván.


El maestro Nino Feliz, muy emocionado clausuró el acto, convencido de que Consenso Universitario es una maquinaria moral, institucional, que está firme en la defensa de la UASD.

Esa maquinaria y sus aliados no permitirán que la Universidad del Pueblo sucumba. Y tiene plena confianza en los maestros y las maestras conscientes de la UASD que son la mayoría; y vendrá el voto por la institucionalidad, porque sus hijos y nietos deben estudiar ahí, y por tanto hay que preservala.

El poeta saluda la ternura, que desde el ideario del Patricio nos invitó a tener fe, a trabajar, a perseverar, a no descansar y confiar en la justicia de nuestra causa y en nuestros propios brazos.
La suerte está echada.
NINO FELIZ RECTOR 2011-2014.

jueves, 3 de febrero de 2011

JOSE MARTI OPINA SOBRE JUAN PABLO DUARTE



Por Alfonso Torres Ulloa

El General Máximo Gómez dirigió una carta a José Martí, publicada en el periódico Patria, en la que solicitaba el apoyo de los cubanos para levantar en Santo Domingo el primer monumento en honor de Juan Pablo Duarte, de esta manera se convierte Gómez en el primer dominicano que procura en el exterior recursos para honrar a Duarte y es al propio tiempo un reconocimiento de la figura de Duarte como el hombre cimero de la patria.

En carta publicada el 17 de abril del año 1894 en el periódico Patria y que dirigiera al General Máximo Gómez, el apóstol cubano José Martí pondera la personalidad de Juan Pablo Duarte, constituyendo un documento digno de la historia y que los dominicanos, en sentido general, desconocen, por lo que doy a conocer dicha carta.

José Martí, director de Patria, le dice a Gómez:

“Y Patria, general, que en el valor de los hombres y en la lealtad de las mujeres ve erguida para siempre en la conciencia dominicana, por sobre tránsitos y apariencias, la vigilancia indómita con que alzó a su pueblo caído el fundador Duarte.

Patria, que la contempla aún, creador sagaz, iluminar con la palabra ardiente, acusada de ilusa y demagógica, a la juventud que en las humildades de “La Trinitaria” aprendió de él a desoír el vil consejo de la soberbia acomodada, o el miedo corruptor, que a la salud de la libertad, inquieta siempre en la niñez, prefieren las barragonías de la deshonra.

Patria, que lo ve urdir, con el poder de su consejo, -y sin más brazos que la idea, madre de brazos, - la rebelión que, de una pechada de héroes, echó atrás al haitiano, tan grande cuando defendía su libertad como culpable cuando oprimía la ajena.

Patria, que ve aún, con el júbilo del alma hermana, encenderse en el aire el fogonazo del trabuco de Mella, y caer, en pie, a un pueblo invencible, de los pliegues que desriza, abriéndose a la muerte, la bandera de Sánchez, allá en la Puerta del Conde famosa, en aquel día de las entrañas , el 27 de febrero.

Patria, que lo vio luego, víctima de sus propios hijos, echado del poder, que era en sus manos como el arca de la República, y morir en la expatriación, triste y pobre, como servicio último a la patria, ante cuyos apetitos y desmayos se debe erguir la libertad, a fin de preservarse mejor, con la poesía del sacrificio.

Patria, con sus dos manos extendidas, pide a los cubanos y puertorriqueños su tributo para el monumento a Duarte: el tributo de los americanos a un mártir de la libertad que redime y edifica: -el tributo de la gratitud de los cubanos a la patria de los héroes que cargaron su cruz en el hombro ensangrentado, y con el casco de sus caballos fueron marcando en Cuba el camino del honor.

Patria, en su próximo número, abre la lista del tributo de Cuba al monumento de Duarte”.

José Martí conoció las ideas y la figura de Juan Pablo Duarte asumo que por medio de Federico Henríquez y Carvajal, quien tuvo a su alcance los documentos originales del padre de la patria; pero también por vía de Máximo Gómez.

Y Martí en esta carta precisa elementos singulares sobre el padre de la patria, lo que nos sugiere que ahondó en su pensamiento e interiorizó la personalidad de Juan Pablo Duarte; y se dolió de sus dolores.

Reconoce Martí en Duarte la fuerza de sus ideas, por eso dice: “creador sagaz, iluminar con la palabra ardiente, acusada de ilusa y demagógica, a la juventud que en las humildades de La Trinitaria aprendió de él a desoír el vil consejo de la soberbia acomodada, o el miedo corruptor, que a la salud de la libertad, inquieta siempre en la niñez, prefieren las barragonías de la deshonra”.

Martí ahonda y señala: “que lo ve urdir, con el poder de su consejo, -y sin más brazos que la idea, madre de brazos,-la rebelión que, de una pechada de héroes, echó atrás al haitiano, tan grande cuando defendía su libertad como culpable cuando oprimía la ajena”.

Ahí está el filósofo pulcro, el analista sagaz que era Martí: “echó atrás al haitiano, tan grande cuando defendía su libertad como culpable cuando oprimía la ajena”. Sentencia de Apóstol.

Este documento martiano debe ser conocido por los buenos y verdaderos dominicanos para amar más y mejor a nuestro Padre de la Patria.